14/5/11

Es curioso cómo la tristeza puede introducirse lentamente a través del micrófono de un teléfono para acabar saliendo por el otro lado del cable, pintándolo todo de gris poco a poco.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ten cuidado, a veces la llevas dentro sin saberlo, cuando olvidas que el tiempo y este mundo han acabado por hacerla parte de tí.

Y cuando la corriente surge de uno mismo es imposible nadar contra ella...